lunes, 30 de mayo de 2011

Poder...

decirlo.

Tarde sin tarde.

Horas contadas.

Los amigos a la espera.

Entrega de palabras tÍmidas. Graves las de ella. Contempladoras salieron de la boca amorosa de él, como si entendiera que lo único que falta es el amor, como si la insensatez aflorara sentires que incuban sentimientos que ya no quiero ver pintados en los sueños... debí contestar cuando dormía... ese era mi sueño, hubiéramos hecho uno juntos... reglas que no se ajustan a la vida que no es vida, ¿si nos acomodamos? ¡¿Cuándo?! es normalmente ridículo, pero pasa, nos sentamos en sillas sin rumbo y así dejamos hacer, no hacemos, camino que creemos concebido en las entrañas... real-mente están fuera de sí, descontroladas cuando lo hacemos al andar...

Me desarticulo, desmembrano tu energía y sin querer te conozco... separados queda la sensatez de lo que veo ¿soy yo?, vemos desde la barrera... una escena en la lejanía ya, una tarde de Dulce y Besos, tú y yo, hemos cambiado nuestros nombres...

Besos sembraste cuidadosa y pasionalmente sin remedio...